sábado, octubre 10, 2009

Bajo tu cuerpo
la escarcha que congela los cactus
se derrite, y la noche -si cierro los ojos-
es noche oscura que no te puede olvidar.
Como si en el campamento del universo
Dios nos juntara
y se pusiera a hacer un fueguito fatuo con nosotros
frotando piedra contra piedra.


Es así, me imagino, como empiezan
los incendios forestales.
Y si no es Dios seremos nosotros, hechos
de un material altamente inflamable,
parecido al que alimenta los calentadores, las estufas
y las viejas cocinas a querosén.



de "El muchacho de los helados y otros poemas" Osvaldo Bossi

Acerca de mí

Mi foto
Egresada de la Escuela de Bellas Artes.Docente de Artes Plásticas y Visuales. Grabadora. Muralista. Escritora. Realiza diseños de vestuario para obras de teatro. Nadadora.